Las grandes aventuras pueden empezar de cualquier modo. Y eso fue lo que me sucedió aquella noche, cuando salí a dar una vuelta por el puerto. Si no me hubiera llamado la atención aquella gran caja de madera que descargaban de un barco, no habría visto al Gran Turco. Y no habría sentido el deseo irresistible de averiguar qu é misterio escondía. Y, sobre todo, no habría vivido una historia fascinante que me permitió conocer un mundo de magia y ensueño y luchar para protegerlo a cualquier precio.
Descripción
1997 Rústica, edición revisada. Ilustrado. 220 p. 19x12 cm.
Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios. Si acepta o continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede cambiar la configuración u obtener más información desde su navegador Web.